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PROPOSICIÓN QUE PRESENTA LA AGRUPACIÓN CIUDADANA INDEPENDIENTE PARA ARANJUEZ (acipa) AL PLENO DE LA CORPORACIÓN PARA  QUE ARANJUEZ CUENTE CON UN ESPACIO DE CONGRESOS Y CONVENCIONES. 

PROPOSICIÓN QUE PRESENTA LA AGRUPACIÓN CIUDADANA INDEPENDIENTE PARA ARANJUEZ (acipa) AL PLENO DE LA CORPORACIÓN PARA QUE ARANJUEZ CUENTE CON UN ESPACIO DE CONGRESOS Y CONVENCIONES.

Este pasado mes de septiembre, durante su intervención en el Madrid Investment Forum 2025, el consejero regional Mariano de Paco señaló que la Comunidad de Madrid ya concentra el 15% de su Producto Interior Bruto (PIB) en sectores como la cultura, el turismo y el deporte. Al mismo tiempo, recordó que el ejecutivo autonómico estaba trabajando en un Plan de Captación de Congresos Estratégicos (MICE) para atraer encuentros profesionales de valor estratégico en cuanto a su impacto económico y turístico. En particular, en aquellas épocas de menor actividad turística en los diferentes municipios madrileños. No hablamos de cifras menores, ya que simplemente el turismo deportivo aporta más de 550 millones de euros anuales a la Comunidad, y durante todo el año pasado se llevaron a cabo más de 350 eventos y actividades de diversos tipos en la región, siendo alrededor de 40 de carácter nacional, europeo y mundial, desarrollados en 77 municipios. 

El impacto del sector turístico en la economía regional supera los 6.000 millones de euros, una cifra muy a tener en cuenta en un país como el nuestro en el que hace no demasiado tiempo el grueso del turismo pasaba por el sol y la playa. Basta decir que solo el congreso anual de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO) que se celebró en 2023 en IFEMA ocupó nada menos que ocho de sus pabellones, por los que pasaron hasta 33.000 delegados. Durante los cuatro días que duró el congreso tuvo un impacto económico directo en la capital de más de 60 millones de euros. Por esta razón, como señalábamos más arriba, la Comunidad de Madrid quiere no solo intensificar su apuesta para traer un mayor número de congresos, especialmente los profesionales, sino también potenciar la atracción de eventos de tamaño medio, desestacionalizarlos y extenderlos fuera de la capital para llevarlos a otros municipios con potencial de crecimiento. Dentro de esta campaña, de hecho, se pretenden potenciar acciones turísticas atractivas para reforzar la proyección internacional de los destinos Patrimonio Mundial regionales, como son Aranjuez, Alcalá de Henares y San Lorenzo de El Escorial.

Centrándonos en el caso local, es más que evidente que Aranjuez reúne prácticamente todas las características para ser un destino atractivo no solo en materia turística, sino también de cara a la celebración de eventos. De cara a la celebración de eventos deportivos de relevancia nacional e incluso internacional nuestra ciudad ya tiene experiencias en este sentido, si bien nos falta la puesta a punto y recuperación de espacios deportivos que arrastran obsolescencia y sobre todo, pasa por lograr el concierto de las administraciones y autoridades deportivas para hacer realidad el gran centro del deporte fluvial que sin duda nuestro Club de Piragüismo, el mejor de España, merece.

En cuanto a la capacidad de celebración de eventos congresuales, Aranjuez también tiene experiencia. Sin embargo, aquí arrastramos problemas logísticos importantes. Y no, no es el principal hándicap la distancia a la capital ya que la situación estratégica de nuestra ciudad como nodo de transportes y redes de alta capacidad compensa la relativa distancia a Madrid. El principal problema que tenemos para albergar eventos de tamaño medio o incluso aspirar a eventos de gran tamaño y relevancia internacional, es el de los espacios expositivos y de convenciones.

Durante la pasada legislatura se avanzó en la elaboración de un catálogo de espacios y recursos, por lo que Aranjuez ha hecho sus deberes en cuanto a lo que necesita el programa de atracción de eventos MICE. Entre esos espacios encontramos muchos de gran prestancia y poso monumental, contando nada menos con uno de los teatros reales más antiguos de España, con los espacios de la Universidad Rey Juan Carlos (en especial con el magnífico edificio recuperado del Hospital de San Carlos) la bicentenaria Plaza de Toros, la Bodega del Real Cortijo o espacios de ciertas dimensiones como los aportados por la empresa que gestiona Gran Casino Aranjuez, sin olvidar el Centro Cultural Isabel de Farnesio. Sin embargo, creemos que sigue faltando el espacio capaz de compaginar logística y una gran capacidad de aforo. Y aquí, lamentablemente, seguimos fracasando en conseguir un gran espacio, lo que en otras localidades llaman palacio o recinto de congresos.

Se lleva intentando desde hace bastantes años, sin lograrlo. Quizá una de las apuestas más fuertes se hizo en 2008, con la pretensión de incluir a Aranjuez en el Spain Convention Bureau (SCB). El SCB es una entidad de la Federación Española de Municipios y Provincias que se dedica a la promoción de congresos, creado en 1984 y que a día de hoy engloba a más de 65 destinos de congresos y convenciones, repartido por toda España. De entre esos destinos, tenemos 63 ciudades y una diputación provincial, siendo Madrid y Alcalá de Henares los representantes regionales actuales. 

Como podemos ver, la inmensa mayoría son capitales (algunas de medio y pequeño tamaño) pero también existen ciudades que no lo son pero que tienen gran capacidad de atracción turística como Lloret, Sitges, Cullera, Gandía, etc… También podemos observar la gran representación de ciudades costeras respecto a las de interior.

Por supuesto, para formar parte de este selecto club hay que reunir una serie de requisitos, que como se puede ver no incluye la relativa cercanía a Madrid, Barcelona o Bilbao, por nombrar algunas de las ciudades más representativas en cuanto a la celebración de congresos. Entre los requisitos que sí hay que reunir se encuentra contar con una oferta de al menos 500 habitaciones, empresas de cátering, equipamientos para actividades complementarias de ocio así como la posibilidad de acoger en un único edificio a 500 personas, así como contar con unas adecuadas comunicaciones terrestres y aéreas.

La oferta turística de Aranjuez supera sensiblemente las 500 habitaciones, además de disponer de un cámping internacional, destacando entre la oferta hotelera dos espacios de cuatro estrellas. Espacios que ya cuentan con nutrida experiencia a la hora de albergar convenciones y eventos de todo tipo. A todo ello hay que añadir la empresa que gestiona el Gran Casino, que cuenta con amplias instalaciones para idéntico fin. Sin embargo, cuando hablamos de acoger en un mismo edificio más de 500 personas así como los espacios expositivos necesarios, Aranjuez adolece de falta de espacios propios o públicos capaces de albergar en todo momento estas actividades, sin necesidad de depender de la disponibilidad de un ente privado.

Como decíamos, en 2008 se hizo una apuesta fuerte para que Aranjuez contara con un recinto o palacio de congresos. Se eligió una zona, el Raso de la Estrella, se eligieron dos edificios (que dicho sea de paso no eran de titularidad municipal) como son los antiguos cuarteles de Guardias Walonas y Españolas, y se eligió a un arquitecto de relevancia internacional como David Chipperfield, premio Pritzker (el de mayor prestigio dentro de la arquitectura) y conocido por actuaciones de recuperación de patrimonio como el Óvalo en Teruel o de construcción de grandes instalaciones como la ciudad de la justicia de Barcelona.

El proyecto de Chipperfield suponía actuar sobre los dos cuarteles situados a ambos lados de la calle o paseo de Coroneles. Se planteó la reconstrucción del cuartel de Guardias Walonas con la mayor fidelidad posible a sus materiales y estructura original para espacios expositivos, albergando dos bucles de espacios para exposiciones temporales estructurados alrededor de un gran patio.

La actuación quizá más controvertida vendría centrada en el otro cuartel, el de Guardias Españolas, que sería sustituido por completo si bien se respetaría su volumetría. Ahí se levantaría un pabellón moderno. Este sería el espacio congresual, estructurado en tres niveles. Una entrada a nivel del suelo dando paso a un espacioso vestíbulo, un piso elevado para salas multiusos y una logia orientada hacia Palacio y por último, en un tercer nivel parcialmente subterráneo, dos espacios para congresos con capacidad para 650 y 300 espectadores. Todo ello rodeado de espacios como camerinos, instalaciones técnicas y núcleos de comunicaciones.

Independientemente de lo que nos pudiera parecer la propuesta (arriesgada) de David Chipperfield y de lo que nos pueda o no gustar la obra del arquitecto británico, es más que evidente que el proyecto no pasó de estos meros bocetos. Incluso aunque hubiese contado con la capacidad económica para llevarlo a cabo (estábamos en época pre-crisis inmobiliaria y de deuda) muy probablemente la ultraconservadora Comisión Local de Patrimonio jamás lo hubiese permitido. Los mismos que, curiosamente, miran para otro lado cuando los mismos cuarteles atraviesan una situación absolutamente inadmisible de ruina y destrucción. Edificios, recordemos, propiedad del Estado que no mueve un solo dedo para su recuperación y que parece esperar que se caigan solos al suelo. En otra ocasión volveremos sobre estos edificios.

Además de este fallido palacio de congresos hubo otra iniciativa, esta privada, para crear un instituto de arte, arquitectura y paisajismo, a ubicar en la ciudad de las artes. Este espacio (Instituto de Arte, Arquitectura y Paisajismo) iba a ligar la actividad docente con el espacio expositivo, articulado en un edificio ubicado en la ladera de Valdelascasas y que iba a contar con una vistosa fachada de madera de bambú. Como decíamos antes, la crisis se llevó por delante el proyecto, como se llevó también (en este caso también por afecciones medioambientales) la gran actuación en la finca de Sotomayor y la Casa de la Monta. Espacio este al menos recientemente rehabilitado, Bien de Interés Cultural y que esperamos sea pronto puesto en uso.

En la actualidad nuestra ciudad atraviesa un momento de menor agobio económico y que, gracias a la gran labor realizada por los departamentos técnicos y delegaciones correspondientes, va a ver como varios proyectos van a poner en valor espacios de gran valor monumental y cultural, y que serán susceptibles de albergar espacio expositivo y cultural, así como ser espacio de respaldo para nuestro gran tejido cultural. Hablamos de los espacios de Atarfe y Matadero, quedando por desgracia en el tintero aún la recuperación del espacio municipal de Cecilio Fernández Bustos o la reapertura de espacios privados que podrían aportar mucho como es el Cine Aranjuez o el Espacio Cultural de Caja Madrid.

Queda pendiente que Aranjuez pueda sumarse a ese selecto club de ciudades que actúan en red y atraen turismo de congresos como es el Spain Convention Bureau (SCB) pero quedaría aún un organismo en el que Aranjuez podría participar, como es IFEMA. En 2023 la alcaldesa de Aranjuez afirmó en una entrevista que uno de los retos que tenía Aranjuez por delante era la de formar parte (de lo que ahora se llama descentralización de congresos de la ciudad de Madrid) del circuito de congresos IFEMA, algo que sería un antes y un después para nuestra ciudad ya que el impacto económico que recibiría nuestra ciudad sería de gran entidad. Para ello, lógicamente, Aranjuez debe contar con un recinto capaz de albergar dichos congresos. Y de nuevo volvemos al punto de partida, la necesidad de contar con grandes espacios.

El pasado mes de junio llevamos una iniciativa a este pleno para exigir a la empresa propietaria de la Azucarera de Aranjuez (uno de los edificios industriales más icónicos de toda la Comunidad de Madrid y que aún está en pie, pese al brutal abandono que sufre). Se instaba a la empresa a que conservara el edificio (es su obligación, no habría ni que instarles) y se instaba a la Comunidad de Madrid a que pusiera en marcha proyectos con el fin de dotar a este espacio (previo acuerdo obviamente con sus actuales propietarios, o bien adquiriéndolo) de inversiones que permitieran poner en marcha proyectos de tipo cultural, expositivo o incluso universitario)

Recordemos también que en 2017 desde acipa propusimos una mesa de trabajo con asociaciones empresariales, Comunidad de Madrid y los entonces propietarios del Aranjuez Plaza (el enorme centro comercial inacabado del barrio de la Montaña) para intentar dar entre todos la debida viabilidad al gigantesco edificio de más de 160.000 metros cuadrados, entendiendo las enormes posibilidades que tiene un edificio tan grande tanto en cuanto a ocio como a celebración de eventos. La proposición fue aprobada si bien tal comisión jamás se puso en marcha (menuda novedad) y el espacio quedó sumido en un marasmo del que pareció salir hace dos años cuando fue adquirido por un grupo inversor.

Como ya conocemos, Inbest GPF Aranjuez SL formalizó el 30 de noviembre de 2023 un contrato privado de compraventa de dos fincas que conforman actualmente el centro comercial Aranjuez Plaza, aún en construcción (aproximadamente terminado en un 90%) por un precio de 4,253 millones de euros (recordemos que su construcción se fue a aproximadamente 100 millones de euros) con una superficie de 169.448 metros cuadrados y con una superficie comercial construible de casi 61.000 metros cuadrados que hasta entonces eran propiedad de la SAREB. La empresa estima en aproximadamente 17 millones de euros el coste de inversión necesario para ser puesto en marcha, sin determinar definitivamente su uso.

Sabemos que el Ayuntamiento y sus servicios técnicos han sido hasta ahora proactivos a la hora de ayudar a sacar este edificio del ostracismo actual (entendiendo que es un activo privado) y tal y como entendimos entonces, en 2017, el Ayuntamiento no puede ser un ente pasivo cuando hablamos de inversiones de estas magnitudes. Entre las instalaciones con las que iba a contar este espacio de haber abierto con los usos para los que fue concebido, podemos reseñar las ocho salas cinematográficas de más de 3.000 metros cuadrados y más de 1.200 butacas, concebidas con la más puntera tecnología (de 2008) y que hoy estarían completamente desfasadas, y más teniendo en cuenta que los usos no serían los mismos hoy.

Pensamos que este espacio, aún en bruto pero con amplias posibilidades, podría ser muy interesante de cara a albergar un espacio para congresos. Faltaría la implicación de las administraciones y más concretamente de IFEMA-Madrid así como de la Comunidad de Madrid dentro de su programa de descentralización de eventos (MICE) como detallábamos al principio de esta proposición. Sea como fuere, Aranjuez tiene potencial presente y aún más de futuro para poder jugar en ambas ligas, en las de Spain Convention Bureau y en la de IFEMA. Falta sentar las bases y la colaboración entre administraciones.

Por todo ello, la Agrupación Ciudadana Independiente para Aranjuez (acipa) eleva al Pleno de la Corporación la siguiente proposición, solicitando al equipo de gobierno: 

  • Que se pongan en marcha los trámites administrativos necesarios para que Aranjuez pueda integrarse en el Spain Convention Bureau (SCB) dependiente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para la promoción y celebración de congresos y eventos. 
  •  Continuar con las gestiones emprendidas para que Aranjuez pueda formar parte del circuito de congresos y eventos de IFEMA, al no ser incompatible con la presencia de la ciudad en el SCB. 
  •  Instar a la Comunidad de Madrid a la puesta en marcha de los planes o convenios de colaboración público-privada necesarios, o bien fondos propios, para que Aranjuez pueda contar a medio plazo con un recinto de exposiciones y congresos polivalente capaz de responder a las necesidades actuales.