PROPOSICIÓN QUE PRESENTA LA AGRUPACIÓN CIUDADANA INDEPENDIENTE PARA ARANJUEZ (acipa) AL PLENO DE LA CORPORACIÓN PARA LA ELABORACIÓN DE UNA ORDENANZA DE SEGURIDAD Y CONVIVENCIA CIUDADANA.
- 2019/10/08 11:20:22
Las ciudades o asentamientos urbanos, desde su origen hace más de 7.000 años en Mesopotamia y el Creciente Fértil (cuando el ser humano deja de ser cazador, recolector y nómada) son entidades que han ido ganando en complejidad. Estos procesos son tanto más rápidos y profundos en función del ritmo de crecimiento de las mismas. En España, sin ir más lejos, la industrialización primero y el desarrollismo después provocaron un masivo éxodo desde los entornos rurales hacia las ciudades. En los últimos años esta tendencia se ha ido incluso acrecentando, de ahí que ahora estemos hablando de fenómenos como el de la “España Vacía”, o mejor dicho, vaciada.
En todo caso, sirvan estos ejemplos para tomar conciencia de la plasticidad de los entornos urbanos. Nuestra ciudad, Aranjuez, no es ni mucho menos una ciudad nueva o de aluvión (aunque dichos fenómenos también se hayan dado) puesto que hay casos mucho más paradigmáticos en España, pero tampoco es una ciudad antigua o con larga tradición urbana. No fue hasta la mitad del siglo XVIII cuando se permitió a personas ajenas a la Corona establecerse en el término, así como la creación de la ciudad misma como tal. Y como decíamos, el aumento de población conlleva también la aparición de nuevas necesidades. Pero no solo aparecieron nuevas necesidades, sino que también surgieron nuevas problemáticas no previstas que hicieron que las administraciones locales tuviesen que dotarse de instrumentos normativos para poder garantizar algo que hoy nos parece tan esencial como la convivencia y la seguridad ciudadana.
Por descontado no podemos caer en el adanismo y pensar que estas cuestiones no han sido planteadas con anterioridad, incluso mucho antes de las modernas corporaciones locales. Pero sí creemos que es momento de condensar instrumentos normativos dentro de un único marco con el fin no solo de ser garantes de la protección de derechos, libertades y seguridad de los ciudadanos, sino también para facilitar la labor de los cuerpos de seguridad de las distintas esferas de la Administración Pública, y en especial la Local.
Como decíamos, no es ni mucho menos la primera vez que se habla, y se legisla, sobre estas cuestiones. Aranjuez ya dispone de un amplio abanico de ordenanzas y normas que versan sobre muy diversos ámbitos, pero lamentablemente y para que estas sean efectivas deben ir actualizándose periódicamente (adaptándose a las nuevas realidades) y esto no ha ido sucediendo con la celeridad adecuada.
Un ejemplo lo tuvimos en el pasado Pleno ordinario, cuando se debatió sobre la necesidad de marcos normativos adecuados respecto a los nuevos tipos de movilidad urbana. En otras ocasiones hemos incidido en asuntos que sin duda nos preocupan a todos, sea cual sea el color político. Nos referimos a fenómenos como el vandalismo, la drogadicción, las mafias que comercian con viviendas usurpadas, ruidos, acceso a las nuevas tecnologías y su uso responsable y por supuesto todas las conductas incívicas. La preservación del espacio público como lugar de encuentro, convivencia y civismo en el que todos podamos desarrollar con plena libertad actividades de ocio, recreo o libre circulación con pleno respeto a los demás constituyen el objetivo final de cualquier marco normativo.
Creemos por tanto necesario que se dé el impulso a la redacción de una ordenanza de convivencia social y la prevención de conductas incívicas, vandálicas y antisociales. Y precisamente ese es el objetivo de la Federación Especial de Municipios y Provincias (FEMP) que a tal efecto elaboró una “ordenanza tipo”, extraordinariamente amplia. La Ordenanza Tipo de Seguridad y Convivencia Ciudadana tiene por objeto la prevención de las actuaciones perturbadoras de la convivencia ciudadana y la protección, tanto de los bienes públicos de titularidad municipal como de las instalaciones y elementos que forman parte del patrimonio urbanístico y arquitectónico de los municipios frente a las agresiones, alteraciones y/o usos indebidos de que puedan ser objeto, la sanción de las conductas incívicas y la reparación de los daños causados. Además, es también objeto de esta Ordenanza el establecimiento de normas que favorezcan el normal desarrollo de la convivencia ciudadana, el buen uso y disfrute de los bienes de uso público, así como su conservación y protección, en el ámbito de las competencias municipales. Por último, regula una serie de medidas encaminadas específicamente al fomento y a la promoción de la convivencia y el civismo en el espacio público, identificando cuáles son los bienes jurídicos tutelados, previendo cuáles son las normas de conducta en cada caso y sancionando aquellas que pueden perturbar, lesionar o deteriorar tanto la propia convivencia ciudadana como los bienes que se encuentran en el espacio público que le debe servir de soporte, tipificando, en su caso, medidas específicas de intervención.
Como señalábamos, muchas de las cuestiones ya planteadas en esta ordenanza tipo ya están presentes en las ordenanzas municipales que ya tenemos en vigor, pero en no pocos casos esta ordenanza tipo las complementa y facilita la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad, en especial las locales. Es por este motivo por el cual son ya muchos ayuntamientos los que están desarrollando e implementando esta ordenanza dentro de su normativa municipal. Creemos oportuno comenzar a dar los primeros pasos, estudiando el marco de actuación necesario y la problemática particular de nuestra ciudad, para en el más corto plazo posible (entendiendo la complejidad de la medida) podernos dotar de este instrumento. Instrumento que en ningún momento debería entrar en colisión con lo que ahora ya tenemos, sino que lo complemente y pueda remediar las carencias que, derivadas de su aplicación, se hayan detectado en estos últimos años
Por todo ello, La Agrupación Ciudadana Independiente para Aranjuez (acipa) eleva al Pleno de la Corporación la siguiente Propuesta, solicitando al Equipo de Gobierno:
• Que se den los primeros pasos, con la elaboración de los estudios pertinentes, para la elaboración y puesta en marcha de una Ordenanza de Seguridad y Convivencia Ciudadana, de acuerdo con la propuesta tipo de la Federación Española de Municipios y contando también, si fuera necesario, con la colaboración y asesoramiento de los municipios donde ya se haya puesto en marcha.