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POR FIN OBLIGADOS A LA LIQUIDACIÓN DE LA SLSV.

SE APRUEBA LA DISOLUCIÓN DE LA SOCIEDAD LOCAL DEL SUELO Y LA VIVIENDA POR IMPERATIVO DE LA LEY 27/2013 ANTE SU DESASTROSA SITUACIÓN ECONÓMICA Y JUDICIAL, CON LA ABSTENCIÓN DE LOS CONSEJEROS SOCIALISTAS Y EL VOTO A FAVOR DE acipa.

Tras más de una década de derroche y nefasta gestión económica del patrimonio y del dinero de todos, dejando la Sociedad Local del Suelo y la Vivienda de Aranjuez en la más absoluta de las ruinas y tras malvender el poco patrimonio que quedaba, la imposibilidad de elaborar un plan de corrección de desequilibrios económicos obliga por Ley a cerrarla, pese a las continuas demandas de cierre por parte de acipa en estos 12 años.

El pasado jueves 9 de abril se celebró el Consejo de Administración de la Sociedad Local del Suelo y la Vivienda en el que se aprobó el inicio de trámites, instando a la Junta General y al Pleno de la Corporación Municipal, para la Disolución de la Sociedad Local. Con esta aprobación, con los votos del quipo de gobierno y de acipa, se da el pistoletazo de salida para cerrar una sociedad, creada en 2001, que jamás ha sido eficaz en la consecución de los propósitos que ella misma se marcó, la gestión eficaz del suelo de Aranjuez, consiguiendo dilapidar más de 100 millones de euros de plusvalías conseguidas por la venta de parcelas de AGFA. Desde acipa siempre manifestamos nuestro rechazo a la creación de un instrumento como este que gestionara el suelo y el dinero de los ribereños, siendo el propio Ayuntamiento quien hubiera gestionado de forma más eficaz, más transparente y más barata.

La liquidación de la Sociedad no es una tarea fácil, hay que responder de las obligaciones y dar seguridad a los que mantienen contratos de arrendamiento con ella y que deberán pasar a depender del Ayuntamiento, revisar adjudicaciones que no han cumplido los plazos de ejecución, una vez contabilizados los Activos y Pasivos, es posible que la liquidación deba hacerse por un procedimiento de concurso de acreedores, trabajo que debiera haberse hecho ya, sin embargo han hecho lo más fácil, malvender hasta donde han podido y ahora aprobar la liquidación de la Sociedad, pero ¿hay suficiente activo para hacer frente al Pasivo? El Gobierno debe pensar que ya el trabajar en serio con los intereses de los Ribereños, lo hagan los siguientes. Desde acipa, lo tenemos claro, con premura, nos podremos a tramitar la liquidación porque una Sociedad arruinada que sigue en funcionamiento sigue generando más gastos. Si fuera una absorción de la Sociedad, el personal sería absorbido, como proponemos para ADESA, pero en este caso absorber la Sociedad, puede suponer cargar al Ayuntamiento con más deudas, por lo que el personal no podrá ser absorbido, pero el Ayuntamiento si necesitará sacar plazas para llevar las tareas pendientes de los alquileres con opción a compra.

Nos habría gustado que el cierre hubiese obedecido al convencimiento del equipo de gobierno de la ineficiencia de la gestión de la Sociedad Local, pues la evidencia así se lo indicaba incluso desde la oposición. Los anteriores gestores del Partido Socialista dilapidaron millones de euros de todos los ribereños en estudios que jamás se materializaron en proyectos beneficiosos para Aranjuez, en la construcción de vivienda cara y proyectos que nunca se llevaron a cabo y los actuales del Partido Popular, en lugar de proceder a su cierre, emprendieron una huida hacia delante que no ha servido más que para malvender patrimonio, subastando parcelas por debajo de su precio de tasación y trasladando las deudas de corto a largo plazo.

Los que han mantenido que la Sociedad era un instrumento eficaz (PP-PSOE) no han dado su brazo a torcer sino que la decisión de cerrar la Sociedad Local viene precisamente obligada por la Ley, el gobierno no elaboró en el pasado mes de abril del 2014 el plan de corrección de los desequilibrios al que le obligaba la ley, ni se han corregido a 31 de diciembre del 2014 por lo que la ley 27/2013 obliga a liquidar la sociedad al final del 2015. Los más de 30 millones de euros de deuda, tener que afrontar procesos judiciales y su correspondiente provisión económica y los demoledores informes de los auditores, obligando a reclasificar activos y engrosar el ya enorme volumen de pérdidas, junto a la imposibilidad de realizar un plan de corrección de desequilibrios al que obliga el Estado han sido los elementos que han precipitado su cierre.

No obstante, como se comentaba al principio, ya en 2011 había serios indicios que indicaban que la mejor solución era la clausura de la Sociedad Local y no fueron valorados por el equipo de gobierno. Aunque fuera solo desde el punto de vista de la eficiencia en la administración de los ingresos procedentes de la enajenación de parcelas en plena época de expansión inmobiliaria, con la evidencia del derroche de más de 130 millones de euros por parte de los anteriores gestores y con las negras perspectivas económicas que hacían presagiar un deterioro económico de los activos de Savia. El actual equipo de gobierno no supo o no quiso, o ambas cosas, advertir esos riesgos, mantuvo la estructura en funcionamiento, malvendió los activos perdiendo los ribereños, patrimonio y trasladando las deudas a futuro, en lugar de buscar una salida que ahora nos viene impuesta por la lógica de las circunstancias, cuatro años después.

Para el consejero de acipa, Jesús Mario Blasco Blanco, “la decisión llega cuatro años tarde, aunque creemos que en realidad son trece, porque esta sociedad jamás debió haber sido creada. No compartimos ni entendimos en su momento que el equipo de gobierno quisiera en 2011 mantener la Sociedad Local, ante la certidumbre de la imposibilidad de enderezar algo que ya ha nacido torcido y que se ha ido transformando con los años en un agujero negro capaz de tragar decenas y cientos de millones de euros sin que los ribereños hayan dicha alguna en su calidad de vida. No podemos estar de acuerdo con esa decisión, ni antes ni ahora porque la gestión que se ha llevado a cabo en estos casi cuatro años ha sido la de trasladar las deudas hacia delante, trasladando los millonarios costes de amortización de créditos a 2017, 2018 y 2019, a la vez que se vende ahora el patrimonio con el que poder responder a esos costes a precios sensiblemente por debajo del de tasación. En nuestra opinión, el ahorro producido estos últimos años invocado por el equipo de gobierno ha obedecido más a situaciones ajenas a ellos, como la renuncia del director gerente que habían propuesto nada más tomar posesión en 2011, con contrato blindado y sueldo de 44.000 euros y al hecho de que Larcovi (contrato que nació con el Gobierno del PP y que mantuvo el Gobierno Socialista con el voto de acipa en contra) dejara de prestar sus servicios a la Sociedad, más que a decisiones políticas reales en materia de ahorro. En resumidas cuentas, por malas decisiones de unos y otros Aranjuez ha perdido mucho dinero, ha perdido patrimonio y lo que es peor, ha perdido años vitales para su desarrollo, puesto que ese dinero derrochado no ha sido invertido en más y mejor calidad de vida para los ribereños. Una vez más, por desgracia, el tiempo nos ha dado la razón”.