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AL GOBIERNO SE LE APAGÓ LA LUZ Y LOS CIUDADANOS EXIGEN QUE LA ENCIENDA.

LA ILUMINACIÓN EN LA CARRETERA DE TOLEDO TERMINA EN LA ANTIGUA FACTORÍA DE LEVER, HACIENDO QUE LOS ACCESOS Y EL TRAMO HASTA LLEGAR A LA A-4 SEA UN COMPLETO PELIGRO PARA LOS CONDUCTORES.

Es incomprensible que se pretenda potenciar esa salida y entrada a nuestra localidad y que al caer la tarde se convierta en un autentico peligro para la circulación, sin arcenes, sin puntos de luz, con el asfalto en penosas condiciones y con los accesos a Cortefiel y al Paseo del Deleite en un estado de abandono absoluto

La deficiencia, cuando no ausencia, de iluminación en los accesos a nuestra localidad está llegando a convertirse en un auténtico problema, no solo para los viandantes, sino también para los conductores que, tienen que jugarse la vida cuando cae la tarde y tienen que circular por la carretera de Toledo y la prolongación del Deleite. El gobierno de nuestra localidad recomendó este acceso como “alternativa” al acceso norte y sus eternas obras de acondicionamiento pero, viendo el pésimo estado que presenta, parece más enfocado a los amantes del turismo de aventura y las emociones fuertes que a cualquier ciudadano que quiera entrar a la ciudad desde la A-4 o desviarse hacia el sur por el Paseo del Deleite.

Son muchos los ribereños que nos han trasladado el enorme peligro para la circulación que supone el tramo de la Carretera de Toledo para acceder a la estación, entrar o salir de Aranjuez a través de Cortefiel y la prolongación del Deleite, simplemente porque los conductores han de adivinar por donde ir y que caminos escoger, ya que la inmensa mayoría de los que circulan por allí conocen el camino y el estado del asfalto… pero qué ocurre con aquellas personas que circulan por primera vez por dicha zona, sencillamente que se encuentran con este panorama…

Pilar Quintana, Concejal Portavoz de acipa no se explica “cómo nuestros Gobernantes son capaces de pedir a los ciudadanos que circulen por estas carreteras para evitar el acceso norte, ya que cualquier persona preferiría circular por una carretera que se encuentra en obras antes que por este peligro de carretera. Afortunadamente no hemos tenido que lamentar ningún accidente de consecuencias graves para todos, quizás sea porque esta carretera la utilizan ribereños que ya conocen su estado, y por eso extreman la precaución a la hora de circular por ella, o bien porque tienden a evitarla. En la pasada legislatura se invirtieron 200.000 euros del plan estatal FEIL para reurbanizar la carretera de Toledo, pero la reurbanización se quedó a medias y los arreglos y la iluminación no llegaron al punto más conflictivo, el enlace con la prolongación del Deleite. Acipa nunca permitiría que los ribereños circulasen por una carretera en estas condiciones, y no sabemos que está ocurriendo desde hace un tiempo en nuestra localidad con las luces, pero lo que sí sabemos es que el Gobierno debe dejar de mirar hacia otro lado y poner solución a los problemas que existen